T-93
Well-Known Member
Hola a todos.
No sé muy bien como empezar esta historia sobre la que, actualmente es mi moto. Tampoco tenía claro dónde colocar el tema, he decidido hacerlo aquí para dejarlo ordenado al menos por modelo y desde luego, iré contando poco a poco todos aquellos trabajos realizados en la moto, intentando en lo posible acompañar con fotos el hilo para compartir con todos vosotros esta "mi" historia, deseando que sea de vuestro agrado e incluso tenga alguna utilidad para indecisos como estuve yo, que antes leía y hoy por fin empiezo a escribir muy ilusionado.
Corría el mes de mayo de 2018 cuando me inscribí en este foro, a pesar de que llevaba un tiempo leyendo varias de vuestras aventuras, siempre con la ilusión de poder comprar una Harley, pero debido a circunstancias de la vida nunca llegó a materializarse.
Empecé a montar en moto en 1984 con un ciclomotor Puch Condor, pasando en 1989 a una Moto Morini Kanguro 350 que disfruté durante 3 años como mi primera moto digamos "gorda". En 1992 llegó una Yamaha Supertenere 750 que estuvo conmigo unos 8 años. En aquel año dos buenos amigos disfrutaban de una Virago 535 y una Suzuki 600 gsx, casi seguro culpables ambos de que hoy tenga una Harley.
En 1993 uno de ellos cambió su Virago por una Heritage Softail de color azul turquesa y qué os puedo decir de aquella moto ... pues me cautivó nada más verla, como sonaba, como relucía, su aspecto robusto ... en fin, a día de hoy él sigue disfrutando su Evo. El otro amigo vendió su Suzuki años más tarde, en el año 2002 y compró otra Heritage Softail, en esta ocasión motor 1450 de carburador, en color rojo guinda y yo seguía soñando pero con menos intensidad, pues de aquellas no montaba en moto. En el año 2000 tuve un accidente en una moto con la que trabajaba al colisionar con un coche, tuve suerte y la cosa se saldó con contusiones varias por todo el cuerpo y 27 días de baja, de aquellas estaba a punto de nacer mi hija y vendí la Yamaha.
Tras casi 9 años de secano, en el verano de 2009 adquirí una Bmw K100 RS-16 del año 92 y con ella volví a recorrer kilómetros. Tras dos años la cambié por otra Bmw, en este caso una K1100LT que me dio averías y alegrías, hasta primeros del 2019 cuando la cambié por la Harley, que fue tan ansiada en mi infancia (vaya tocho y todavía no empecé a hablar de la Softail, lo siento
)
Decidido por fin a adquirir la moto, tenía dudas entre dos modelos de estética parecida, la Road King y la Heritage Softail. Vi varias en el mercado de ocasión particular y alguna tienda, descartando la Road no por su mayor peso que difiere en unos 15/20 kilos con la Heritage, si no por su altura ya que quería hacer un uso diario de la moto y se me hacía torpe en ciudad, sumado a que descubrí hace dos años que tengo una vértebra aplastada y cuanto más baja sea la altura del asiento mejor para su manejo sin forzar la espalda. Debo contar que mi amigo de la infancia que compró la Heritage roja, al hablar de que estaba buscando moto, me ofreció su moto para que la probase antes de comprar una (cosa que ocurre una vez en la vida y le estoy sinceramente agradecido). Tras los primeros kilómetros con su Heritage, supe que "este modelo era mi moto". Muy pesada a la par que bajita, cómoda para mi esqueleto (complexión), correcta en consumos para su cilindrada y que cuenta con una estética complicada de mejorar (gusto personal mio, claro está). Tras 3 días de fogosa relación máquina-hombre, la retorné al domicilio de su dueño con la completa convicción de que compraría una Heritage.
Tras descartar varias unidades del mercado de ocasión, me decidí por una unidad que se encontraba a unos 500 km de mi casa, busqué un billete de tren y el 15 de marzo de 2019 me acerqué a conocerla. Tras las presentaciones, pruebas oportunas e impresiones varias entre vendedor y servidor, cerramos la compra-venta y regresé a lomos de ella. Recuerdo que fue un viaje encantador en el cual se mezclaban a partes iguales el simple placer de conducirla, con la inexperiencia en su manejo, así como por la ruta que no era habitual para mi. Seguramente me falten palabras para definir aquel viaje de regreso a casa, estaba soñando el sueño aparcado desde hacía 25 años, pero en esta ocasión era tan real como el atronador sonido de sus escapes, simplemente sonrío al recordarlo escribiendo estas líneas.
Foto en mitad de alguna parte. Parada para repostar y estirar las piernas.
Se trata de una Heritage Softail modelo FLSTCI, de septiembre del año 2005, con 22950 km en su marcador. Como se puede apreciar presenta buen estado y está prácticamente de origen. Llevaba puestos unos escapes abiertos Screamin Eagle que sonaban muy bien a poca velocidad, pero en carretera les perdí la gracia jajaja. La caja que llevo en el sillín contenía los silenciosos de origen.
Birras
..//..
No sé muy bien como empezar esta historia sobre la que, actualmente es mi moto. Tampoco tenía claro dónde colocar el tema, he decidido hacerlo aquí para dejarlo ordenado al menos por modelo y desde luego, iré contando poco a poco todos aquellos trabajos realizados en la moto, intentando en lo posible acompañar con fotos el hilo para compartir con todos vosotros esta "mi" historia, deseando que sea de vuestro agrado e incluso tenga alguna utilidad para indecisos como estuve yo, que antes leía y hoy por fin empiezo a escribir muy ilusionado.
Corría el mes de mayo de 2018 cuando me inscribí en este foro, a pesar de que llevaba un tiempo leyendo varias de vuestras aventuras, siempre con la ilusión de poder comprar una Harley, pero debido a circunstancias de la vida nunca llegó a materializarse.
Empecé a montar en moto en 1984 con un ciclomotor Puch Condor, pasando en 1989 a una Moto Morini Kanguro 350 que disfruté durante 3 años como mi primera moto digamos "gorda". En 1992 llegó una Yamaha Supertenere 750 que estuvo conmigo unos 8 años. En aquel año dos buenos amigos disfrutaban de una Virago 535 y una Suzuki 600 gsx, casi seguro culpables ambos de que hoy tenga una Harley.
En 1993 uno de ellos cambió su Virago por una Heritage Softail de color azul turquesa y qué os puedo decir de aquella moto ... pues me cautivó nada más verla, como sonaba, como relucía, su aspecto robusto ... en fin, a día de hoy él sigue disfrutando su Evo. El otro amigo vendió su Suzuki años más tarde, en el año 2002 y compró otra Heritage Softail, en esta ocasión motor 1450 de carburador, en color rojo guinda y yo seguía soñando pero con menos intensidad, pues de aquellas no montaba en moto. En el año 2000 tuve un accidente en una moto con la que trabajaba al colisionar con un coche, tuve suerte y la cosa se saldó con contusiones varias por todo el cuerpo y 27 días de baja, de aquellas estaba a punto de nacer mi hija y vendí la Yamaha.
Tras casi 9 años de secano, en el verano de 2009 adquirí una Bmw K100 RS-16 del año 92 y con ella volví a recorrer kilómetros. Tras dos años la cambié por otra Bmw, en este caso una K1100LT que me dio averías y alegrías, hasta primeros del 2019 cuando la cambié por la Harley, que fue tan ansiada en mi infancia (vaya tocho y todavía no empecé a hablar de la Softail, lo siento
)Decidido por fin a adquirir la moto, tenía dudas entre dos modelos de estética parecida, la Road King y la Heritage Softail. Vi varias en el mercado de ocasión particular y alguna tienda, descartando la Road no por su mayor peso que difiere en unos 15/20 kilos con la Heritage, si no por su altura ya que quería hacer un uso diario de la moto y se me hacía torpe en ciudad, sumado a que descubrí hace dos años que tengo una vértebra aplastada y cuanto más baja sea la altura del asiento mejor para su manejo sin forzar la espalda. Debo contar que mi amigo de la infancia que compró la Heritage roja, al hablar de que estaba buscando moto, me ofreció su moto para que la probase antes de comprar una (cosa que ocurre una vez en la vida y le estoy sinceramente agradecido). Tras los primeros kilómetros con su Heritage, supe que "este modelo era mi moto". Muy pesada a la par que bajita, cómoda para mi esqueleto (complexión), correcta en consumos para su cilindrada y que cuenta con una estética complicada de mejorar (gusto personal mio, claro está). Tras 3 días de fogosa relación máquina-hombre, la retorné al domicilio de su dueño con la completa convicción de que compraría una Heritage.
Tras descartar varias unidades del mercado de ocasión, me decidí por una unidad que se encontraba a unos 500 km de mi casa, busqué un billete de tren y el 15 de marzo de 2019 me acerqué a conocerla. Tras las presentaciones, pruebas oportunas e impresiones varias entre vendedor y servidor, cerramos la compra-venta y regresé a lomos de ella. Recuerdo que fue un viaje encantador en el cual se mezclaban a partes iguales el simple placer de conducirla, con la inexperiencia en su manejo, así como por la ruta que no era habitual para mi. Seguramente me falten palabras para definir aquel viaje de regreso a casa, estaba soñando el sueño aparcado desde hacía 25 años, pero en esta ocasión era tan real como el atronador sonido de sus escapes, simplemente sonrío al recordarlo escribiendo estas líneas.
Foto en mitad de alguna parte. Parada para repostar y estirar las piernas.
Se trata de una Heritage Softail modelo FLSTCI, de septiembre del año 2005, con 22950 km en su marcador. Como se puede apreciar presenta buen estado y está prácticamente de origen. Llevaba puestos unos escapes abiertos Screamin Eagle que sonaban muy bien a poca velocidad, pero en carretera les perdí la gracia jajaja. La caja que llevo en el sillín contenía los silenciosos de origen.
Birras
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