Bueno tenemos media docena en la lista, y uno de ellos acompañado para hacer también la parte práctica del curso; en total siete personas en la pista. Con eso ya formamos un grupo para un monitor. Por algo se empieza. No vamos tan mal.
Por otra parte vamos a ir comentando algunos detalles que caracterizan y rodean a un curso.
Para empezar, hablemos de la moto, del estado en el que debe presentarse el alumno con ella al curso.
No hace falta nada especial, nada en absoluto, ni por tratarse de una Harley ni tratándose de cualquier otra moto. Se hacen muchos comentarios fantasiosos por ahí y se crean verdaderas preocupaciones en el que va a entrar por primera vez en una pista, pero lo cierto es que carecen totalmente de sentido.
La moto debe de ir al curso, simplemente, en buen uso.
Las pastillas de freno con un grosor suficiente como para que no se agoten durante el curso. En el caso de la transmisión, ya sea correa dentada o cadena, que se hallen en buen estado, que no den problemas. Lo mismo ocurre con los amortiguadores y la horquilla. Y en el caso de los neumáticos, con el dibujo en un estado que no llegue a desgastarse durante los kilómetros que se hagan en la pista y, lógicamente, en el viaje de vuelta.
Sobre los neumáticos, alguno habrá escuchado decir que el asfalto de la pista se los come como una lija, que se los devora y te deja sin ellos a la que te descuides.
Sí es cierto que se produce un desgaste algo mayor, pero, para que os hagáis una idea, hace ya algún tiempo que realicé un cálculo que arrojó un resultado pienso que muy revelador:
Si entrásemos en un circuito como el de Kotarr con una superdeportiva y fuésemos capaces de rodar a un ritmo muy fuerte, mirando ya el récord de la pista, un neumático blando de los que montan esas motos se gastaría unas tres veces más que en la carretera. Es decir, que si a lo largo del curso se cubriera un total de 200 km, el desgaste sufrido por los neumáticos de una doble erre sería el equivalente a haber recorrido 600 km.
Haciendo un curso en una Harley nos quedaremos a años luz de ese desgaste, y su diferencia con el que se produce en la carretera será prácticamente despreciable.
Por otra parte añadir que si estamos muy próxmos a sustituir, regular o repasar cualquiera de estos elementos, será bueno aprovechar para hacerlo antes de ir al curso.
Seguiremos hablando de otros detalles.
Gracias.