aran
Well-Known Member
Hoy he probado la Sportster 1200 XL Custom.
Lo primero que notas cuando te sientas encima es que es baja, muy baja. Un servidor, con 1,72, sentado a moto parada, llevaba las rodillas dobladas. Si me levantaba, el asiento no me tocaba el culo.
El asiento es relativamente cómodo, aunque cuando llevas unos 200 kilómetros empiezas a notar un "cosquilleo" en las nalgas, marca de la casa.
La suspensión contribuye a que las distancias se hagan cortas, ya que filtra bastante bien los baches. Incluso en curvones de autopista, al pillar un bache o un cambio de asfalto, no hace ningún raro. Sigue la trayectoria con precisión milimétrica.
La postura de conducción es buena, aunque las estriberas adelantadas, dejando de lado la estética, dotan a las piernas de una posición un tanto curiosa: no vas ni muy estirado... ni muy curvo.... aunque la sensación es de "piernas arriba". También dichas estriberas vibran muchísimo a partir de 110. Tanto, que al cabo de los quilómetros empiezas a notar un cosquilleo de la rodilla para abajo.
El manillar lo llevas inclinado hacia ti, en una postura francamente ejemplar. El velocímetro está anclado entre el manillar y el depósito, no sobre el faro.
El freno de atrás me ha decepcionado muchísimo. Imposible frenar sólo con él. Y mucho menos, bloquear la rueda para realizar un poco de derrape. Simplemente, no está. No así el freno delantero, donde muerde con fuerza y para la moto casi al instante.
El gas es contundente: abres y sale como un mísil (bueno, dejémoslo como un "cohete de feria".... no seamos tan "talibanes"). También por carretera. Con la 5ª engranada, a 110..... golpe de gas y sale de una manera espectacular. O por lo menos, da esa sensación.
En ciudad....... ayyy en ciudad: es sencillamente perfecta. La postura de conducción con el manillar relativamente ancho pero cerca, lo baja que es y la contundencia de la salida a moto parada, la hacen un "vespino". Puedes flirtear entre los coches como si fueras en "scooter". Una maravilla.
Además, la moto es bonita de narices, con su ancha horquilla delantera y su bombo delantero (16"). Ignoro si la horquilla está lanzada, pero da el pego.
No "peta" fuerte, debido a las altas restricciones de ruido.
Pero.... ¿no tiene pegas?
Pues sí: cuando tumbas la moto, sea en una curva, en una rotonda, a baja velocidad, en trazada... en fin, donde sea.... la moto cae literalmente hacia el interior de la curva. He hecho varias pruebas: curvas en bajada, en subida, en rotondas.... en todos los sitios.... te hace un "raro". No sé si responde a su ancho neumático delantero o a su centro de gravedad, pero la sensación te la da. Después de 100 km., la sensación no era tan acusada pero en una rotonda, donde me he hecho un "recto" por error, al rectificar el giro, la he tenido que ir metiendo "a plazos" en la trazada correcta.
En definitiva: una buena moto para todo uso, sobre todo en ciudad y en la que las distancias van a parecer cortas.
Lo primero que notas cuando te sientas encima es que es baja, muy baja. Un servidor, con 1,72, sentado a moto parada, llevaba las rodillas dobladas. Si me levantaba, el asiento no me tocaba el culo.
El asiento es relativamente cómodo, aunque cuando llevas unos 200 kilómetros empiezas a notar un "cosquilleo" en las nalgas, marca de la casa.
La suspensión contribuye a que las distancias se hagan cortas, ya que filtra bastante bien los baches. Incluso en curvones de autopista, al pillar un bache o un cambio de asfalto, no hace ningún raro. Sigue la trayectoria con precisión milimétrica.
La postura de conducción es buena, aunque las estriberas adelantadas, dejando de lado la estética, dotan a las piernas de una posición un tanto curiosa: no vas ni muy estirado... ni muy curvo.... aunque la sensación es de "piernas arriba". También dichas estriberas vibran muchísimo a partir de 110. Tanto, que al cabo de los quilómetros empiezas a notar un cosquilleo de la rodilla para abajo.
El manillar lo llevas inclinado hacia ti, en una postura francamente ejemplar. El velocímetro está anclado entre el manillar y el depósito, no sobre el faro.
El freno de atrás me ha decepcionado muchísimo. Imposible frenar sólo con él. Y mucho menos, bloquear la rueda para realizar un poco de derrape. Simplemente, no está. No así el freno delantero, donde muerde con fuerza y para la moto casi al instante.
El gas es contundente: abres y sale como un mísil (bueno, dejémoslo como un "cohete de feria".... no seamos tan "talibanes"). También por carretera. Con la 5ª engranada, a 110..... golpe de gas y sale de una manera espectacular. O por lo menos, da esa sensación.
En ciudad....... ayyy en ciudad: es sencillamente perfecta. La postura de conducción con el manillar relativamente ancho pero cerca, lo baja que es y la contundencia de la salida a moto parada, la hacen un "vespino". Puedes flirtear entre los coches como si fueras en "scooter". Una maravilla.
Además, la moto es bonita de narices, con su ancha horquilla delantera y su bombo delantero (16"). Ignoro si la horquilla está lanzada, pero da el pego.
No "peta" fuerte, debido a las altas restricciones de ruido.
Pero.... ¿no tiene pegas?
Pues sí: cuando tumbas la moto, sea en una curva, en una rotonda, a baja velocidad, en trazada... en fin, donde sea.... la moto cae literalmente hacia el interior de la curva. He hecho varias pruebas: curvas en bajada, en subida, en rotondas.... en todos los sitios.... te hace un "raro". No sé si responde a su ancho neumático delantero o a su centro de gravedad, pero la sensación te la da. Después de 100 km., la sensación no era tan acusada pero en una rotonda, donde me he hecho un "recto" por error, al rectificar el giro, la he tenido que ir metiendo "a plazos" en la trazada correcta.
En definitiva: una buena moto para todo uso, sobre todo en ciudad y en la que las distancias van a parecer cortas.