Jesús, publica las fotos previamente en una página gratuita como picasa o flickr, y luego pon la URL de la foto en el campo que te sale en blanco cuando clickeas en publicar la foto en el foro.
En cuanto a la Sportster, creo que ya lo he escrito, no sé si en este hilo, pero muchas veces.
Mi opinión es que es la moto que es: una neoclásica con aire deportivo y manejable, pero claro, todo al estilo años 50. Creo que de prestaciones (motor) está servida para el tipo de moto que es y la parte ciclo que gasta: su chasis, su geometría, su peso, la postura de conducción, etc.
Creo también que la moto es suficientemente bonita de serie como para que sea una prioridad modificar su estética, además de que hay que tener muy buen gusto y mucha experiencia para mejorar lo que fabrica gente que lleva décadas diseñando motos (algunos, pocos, lo consiguen).
Tampoco soy partidario de aumentar el sonido de la moto y soy capaz de apreciar la cadencia especial de las explosiones del EVO con escapes de serie, tengo suficiente con ese sonido y creo que mis congéneres también (llámame nenaza).
Pues bien, teniendo en cuenta la declaración de intenciones de arriba (que muy poca gente en el mundo Harley comparte), para mí las modificaciones fundamentales en una Sporty van en la línea de mejorar su maltrecha parte ciclo de fábrica. Suspensiones de tercera división, delante y detrás, frenos insuficientes, gomas de piedra (por lo menos en 2010 con los Dunlop), y asiento incómodo. Para mí que al margen de la reducción de costes que HD gana montando esos componentes, se trata de una estrategia muy bien pensada para hacerte creer que una Sportster de 900 cc es una moto ciudadana que sólo sirve para callejear de bar en bar y para trayectos cortos. Sólo hace falta sacar la cabeza del catálogo de Harley para descubrir que eso no es cierto.
¿Qué he hecho?
Pues lo que explico:
- Cambiar las suspensiones delante y detrás pidiendo los muelles y los Progressive 440 por internet, y cambiándolos yo mismo con ayuda del "elevador de carrefour" y un colega.
- Cambiar el asiento de serie por un sundowner pedido por internet y montado por mí mismo (10 minutos).
- Cambiar las piedradunlop en cuanto empezaron a flaquear, primero por Metzeler Marathon y luego por Michelin Commander II, las mejores. Esto en un taller especializado de neumáticos.
- Cambiar las pastillas de freno de atrás por Lucas (poca mejora) y pronto las de delante por Brembo. Pedidas por la red y montadas por mí.
Y nada más. Estoy por hacer otro cambio para aumentarle la autonomía, pero he tenido problemas logísticos y ya no sé cuándo voy a poder triunfar. Y creo que con todo esto tengo la moto acabada y lista para rodar a cualquier sitio al que se pueda llegar por carretera.