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Well-Known Member
Si hay algo que me da más porculo que el que me "saluden" estirando la pata ccuando me adelantan es el hecho de tener que echar yo la gasolina y tener que estar enredando todo el rato con las putas mangueras apestosas y grasientas y que encima se derrame la gasofa por encima del depósito. Debería de estar prohibdo que la gente normal y sin titulacion específica de ningun tipo manejase las mangueras de combustible. Cualquier día ocurre algo gordo.
Esta mañana he ido a la Gasolinera Facundo, un "pequeño" terrateniente de la zona. El caso es que, a modo de gancho publicitario y reclamo comercial ha puesto un cajero automático (no es el único, lo he visto en más sitios) a traves del cual, llegas, metes los billetes o la tarjeta y luego tú mismo te echas la gasolina (se te dé bien o la tires la mitad por encima de la moto), colocas la puta manguera grasienta y pringosa y te piras. No tiene casi ni guantes ni trapos para limpiarse la mugre.
El caso es que si te echas tú la gasofa, te cuesta siete centimos menos el litro.
A mi no me convence con esa engañifa y prefiero que venga Beatriz, la chica que curra allí y me llene ella el depósito. Me gusta más.
De la otra forma, en cuanto metas los billetes al cajero y tengas un problem de funcionamiento, te quedas sin billetes y sin gasofa. Y vete a reclamarle a Facundo . Que estará en su casa tumbado en el sofá tocandose los cojones y contando billetes de los gilipollas que le llenan el cajero.
El día que venga un perturbado al que se le hayan atrancado los billetes y no los pueda recuperar o no pueda echar gasofa y continuar su ruta, lo mismo vuela por los aires la gasolinería.
Esta mañana he ido a la Gasolinera Facundo, un "pequeño" terrateniente de la zona. El caso es que, a modo de gancho publicitario y reclamo comercial ha puesto un cajero automático (no es el único, lo he visto en más sitios) a traves del cual, llegas, metes los billetes o la tarjeta y luego tú mismo te echas la gasolina (se te dé bien o la tires la mitad por encima de la moto), colocas la puta manguera grasienta y pringosa y te piras. No tiene casi ni guantes ni trapos para limpiarse la mugre.
El caso es que si te echas tú la gasofa, te cuesta siete centimos menos el litro.
A mi no me convence con esa engañifa y prefiero que venga Beatriz, la chica que curra allí y me llene ella el depósito. Me gusta más.
De la otra forma, en cuanto metas los billetes al cajero y tengas un problem de funcionamiento, te quedas sin billetes y sin gasofa. Y vete a reclamarle a Facundo . Que estará en su casa tumbado en el sofá tocandose los cojones y contando billetes de los gilipollas que le llenan el cajero.
El día que venga un perturbado al que se le hayan atrancado los billetes y no los pueda recuperar o no pueda echar gasofa y continuar su ruta, lo mismo vuela por los aires la gasolinería.
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