Ha dado para mucho el hilo, esto de lo que hablais se llama conciliación de la vida familiar. Lo que cada uno opina o decide es respetable del todo, pero os aconsejo lo que dice Iron girl. Es necesario reservar el espacio personal que cada uno considere oportuno. Si no, a la larga se paga. La pareja y la familia se resiente.....
Yo conozco casos donde se llega a un acuerdo y se reparten las vacaciones con los niños, ¿quién dijo que hay que estar todos juntos? ¿Por qué si a mi mujer le apetece ir a Londres a aprender inglés con un par de amigas o ir en moto a Francia no lo puede hacer? ¿Quién dice que hay que estar todos junticos? Luego pasa lo que pasa, hay parejas que como no estan haciendo lo que quieren nunca, se frustran, lo pagan con el que tiene al lado, terminan separándose y ahora sí, haciéndolo todo por separado. Todo por no querer o poder "prescindir" del otro. Y no por eso la quiero menos. Lo contrario, pienso que es una muestra de gratitud y generosidad hacia el otro. Tendría que ser la pareja la que te dijera, mira vete a hacer ese viaje que tanto deseas o esa actividad que tanto te gusta. Ya me apaño yo. Ya me devolverás el favor en otro momento. Yo lo veo así y lo creo profundamente. Todos somos prescindibles. Evidentemente el trabajo manda, de cada uno depende si le merece la pena irse o no, pero teniendo tiempo (mucho o poco) y dinero ( mucho o poco), creo que siempre se puede uno reservar su hueco de individualidad. Yo dentro de poco voy a tener mi primer bebe. Si me tuviera qe quedar con él, yo solo durante una semana o dos quién me va a decir que no soy capaz? Incluso aún teniendo trabajo, ¿no hay guarderías? ¿Canguros?¿más familia?...Que iba a ir apurado?, quizá, pero de eso se trata, le hago un favor a mi pareja, si no costara esfuerzo no sería un verdadero favor.
Lo que yo observo es que hay personas egoístas que son incapaces de ver disfrutar a su pareja fuera de la familia, parece que les fastidiara, tuvieran celos o creyeran que no les quieren.
En fin, que vaya rollo he soltado.
Compañero, coge la moto y tira millas, cuando se te gaste la pasta pide, recoge las mesas de un bar, o búscate la vida para llenar el depósito. Seguro que lo pasarás mal algunas veces, pero la satisfacción de salir adelante y las vivencias que obtendrás te harán crecer más que cualquier otra experiencia. Te lo dice uno que ha estado con la mochila a cuestas más de una vez, sin un duro, con hambre, cayendo chuzos de punta y esperando que amaine debajo de un cobertizo. Oye y tan feliz.