La moto es chulísima, y si, a mi también me gusta muy mucho el manillar (¿puede ser el de una Street Bob?). Además, esos cuelgamonos bajitos son comodísimos, me da que en cuanto ruedes un poco mas con él no lo quitas ni de coña.
Y si, en las rotondas hay que acostumbrarse a ellas, pero le cogerás el tranquillo enseguida, ya lo verás.
Enhorabuena y a disfrutarla siempre por lo negro...