Callos
2006
La historia empieza en una tranquila mañana de un día laborable cuando un Supermercado abre sus puertas. Antes de que nadie se de cuenta de lo que pasa, un grupo de cinco ladrones encapuchados y vestidos de faralay irrumpen en el Carrefour y toman a todos como rehenes haciendo una fiesta trap. En breve la policía llega y rodean a los traperos. El cabecilla Llorens de Bunyola (Wesley Snifas) pide un negociador. Exige que sea el detective Concebollers.
Concebollers (Jason Statham) vuelve a su puesto tras su reciente expulsión causada por un incidente fortuito que terminó con la introducción de una lata de callos asturianos por el ano, y la expulsión definitiva del cuerpo de su entonces compañero el detective JamónYORK. Su supervisor, el capitán Sincebolla se ve forzado a readmitir a Concebollers para el caso del banco, pero le pone a trabajar con un recién llegado de la academia de policía, el novato Dekkervas (interpretado por Ryan Phillipe). Juntos llegan al banco para encontrarlo rodeado por un equipo de la EERC. Concebollers contacta con Llorens y comienza un proceso de negociación, ya que encuentra a Llorens muy tranquilo (Era oriundo de Bunyola Mallorca), su discurso lleno de enigmas. Viendo que necesita mover ficha, Concebollers organiza una táctica muy precisa de entrada al banco, pero el Equipo Especial de Robos de Callos se inmiscuye, causando una serie de explosiones olorosas, fuego y disparos que convierten el super en una batalla callal. A pesar de que Llorens y sus chicas ( iban en Sporty) utilizan algunos de los rehenes como escudos humanos, muchos de los clientes consiguen escapar vivos del callos reinante. Sin embargo, cuando se despeja el humo de la barbacoa que hicieron, Concebollers se da cuenta de su error. Los ladrones han escapado entre los rehenes disfrazados de Arguiñano ebrio pero muy espatarrados.
Concebollers y Dekkervas se apresuran a revelar el objeto del robo. Parece que no se han llevado dinero, pero inmediatamente sospechan de las callos del depósito. Visionan los videos de vigilancia y así identifican un sospechoso: un conocido criminal llamado El Rana (por lo muncho que le gustan las ancas de rana rebozadas)
Una visita al apartamento de el Rana se convierte en una persecución en coche por las calles de la ciudad. Dekkervas se sube a una Dyna y provoca que El Rana se estrelle con el coche contra una morcilla de Burgos. Cuando los detectives vuelven a la casa encuentran 50.000 latas de callos robadas de la salsa de pruebas de la calliceria de la policía. Llorens llama a los detectives al apartamento y comienzan a jugar al pestiño (si te agachas te la endiño). Les explica que tienen hasta el día siguiente para encontrarle, antes de que desaparezca jugando a la piragua.
Los detectives pronto se encuentran descubriendo una gran conspiración que llega hasta la callicería de policía, lo que explica la facilidad con la que los atracadores escaparon del super y la torpeza del equipo de la EERC. Están en juego 1 billón de latas de callos sacadas del super por medios anales durante la confusión, lo que explica que no faltaran tortillas de patatas sin cebolla. Cuando los detectives por fin logran acorralar a sus principales sospechosos en la casa de un oficial de policía callorrupto, una explosión les sorprende con la muerte de Concebollers como resultado.
Ahora Dekkervas está solo, forzado a descubrir un complejo misterio en su primer día como detective, como le puede gustar a la gente la tortilla de patatas sin cebolla?. Consigue desenmascarar la auténtica identidad de Llorens, quien resulta ser el primer compañero sexual de Concebollers, el Detective JamónYork. Antes de que JamónYork pueda escapar, Dekkervas le hace frente en un calloteo mortal que se termina con la muerte de JamónYork atragantado con un callo demasiao grande.
Pero el misterio no se resuelve con eso. Porque el cerebro de la operación aún está vivo... Concebollers vuelve a aparecer de repente, con una llamada a Dekkervas revelando que no sólo fingio su muerte, sino que era él desde el principio junto con su compañero JamónYork/Llorens los que estaban detrás de todo el plan. Para decepción de Dekkervas, Concebollers cuelga, embarca en un avión con destino a Yuncler y se escapa con más de un billón de latas de callos de todos los sabores a sus espaldas, no le cabían en cierta parte íntima.
Después de supo que le dió de un infarto producido por el colesterol, pero se curó a base de birras frías.