Es una medida más para un gobierno endeudado hasta las trancas y con un gasto público disparado.
No es para el contribuyente, los consumidores esa diferencia de consumo no lo va a notar, pero el gobierno va ahorrar miles de euros durante la aplicación.
Al igual que la rebaja de 0,20, es un préstamo a interés 0 que los “gasolineros” le están pagando, mantengo los impuestos al combustible, ellos ponen del bolsillo la rebaja y ya la pago yo cuando me venga y como me venga bien, con lo fácil que sería reducir el impuesto directamente en relación a esos 0,20 y así se quita de follones.
La ecología, progresismo e “igualdad” no sale gratis, es la tendencia de la mayoría de los países, mirad lo que vale un coche tipo mustang en Holanda o los impuestos de los países nórdicos.